Rafa Nadal no es el único deportista que puede presumir de tener su propio Richard Mille. La prestigiosa casa suiza ha creado para Iceman, el apodo como se conoce al piloto finlandés Räikkönen en el circuito, una pieza a la altura de su carisma. Destaca por su impactante imagen y mínimo peso. Eso sí, su precio no es apto para tacaños.
No hay país más que sienta más pasión por la Alta Relojería que Singapur, así que nada mejor que aprovechar la reciente celebración de su Gran Premio de Automovilismo para presentar las piezas más deseadas del mercado. Así ocurrió el pasado 18 de septiembre en el trazado de su circuito urbano cuando Richard Mille mostró por primera vez la edición dedicada a Kimi Räikkönen que ha hecho bajo el nombre de RM 50-04.
Todo el mundo está de acuerdo con que Räikkönen es un piloto fuera de lo normal. Lo es por longevidad (ha cumplido 39 años y durante su trayectoria ha disputado más de trescientos premios), pero también por su calidad contrastada (campeón del mundo en 2007 y ganador de más de una veintena de carreras) y, por supuesto, por su excéntrica personalidad; la cual le ha llevado a reconocer, sin ningún rubor, haber pasado dos semanas completamente bebido entre dos grandes premios, o su tendencia a no hacer caso a las órdenes de equipo que recibe durante la carrera.
Tampoco el RM 50-04 es un reloj normal. Le va mucho mejor la definición de extraordinario. Su creación prolonga la tradición de cronógrafo manuales que ayudaron a labrar su imagen de firma de altas prestaciones a comienzos de entre siglo. Muchas de las características ya las encontrábamos en el «prehistórico» modelo RM 004 y, por supuesto, también aparecen en las dos ediciones previas que se han lanzado del RM 50 dedicadas a Airbus Corporate Jets y la escudería McLaren.
Hablamos de un reloj equipado con tourbillon, cronógrafo ratrapante, indicador de par y selector de función. A estas prestaciones hay que sumar el uso de materiales tecnológicos para reducir el peso hasta extremos inverosímiles. Por ejemplo, el mecanismo apenas pesa 7 gramos gracias a que sus puentes y platina están realizados con titanio y carbono. La casa calcula que el mecanismo del RM 50-04 está preparado para resistir golpes con una intensidad de 5.000 G; algo muy útil si pensamos la tremenda fuerza que soporta un reloj en la muñeca de un piloto de Fórmula 1.
En cuanto a la caja, tanto el frente como el fondo están fabricados con cuarzo TPT. Es una material que comparte igual sistema de construcción que el carbono, con la diferencia de que puede colorearse a discreción. Una cualidad que ha sido aprovechada por los creativos de la caja para escoger el mismo tono de blanco que lucen los monoplazas de Alfa Romeo, la escudería en la que actualmente pilota Räikkönen.
El RM 50-04 sale al mercado en edición limitada de 30 ejemplares, con un precio que ronda los 950.000 euros dependiendo del cambio del momento. Ya podemos asegurar que no será la última pieza de la firma relacionada con la Fórmula 1. Al fin y al cabo, Richard Mille, por minoritaria que parezca, es la marca con mayor presencia en el campeonato. Además de colaborar con la citada Alfa Romeo, las firma relojera también es patrocinadora de las escuderías McLaren y Haas.
Podéis seguirnos en las redes sociales en Facebook, Instagram y Twitter.
Fuente de la noticia: Expansión